Ordenación Diaconal

“Doy gracias al que me dio fuerzas, a Cristo Jesús, Señor nuestro, porque me consideró digno de su confianza, poníendome en el ministerio” (1Tm 1,12).

ORACIÓN ANTE EL CRICIFIJO DE SAN DAMIÁN

¡Oh Altísimo y glorioso Dios!, ilimina las tinieblas de mi corazón y dame fe recta, esperanza cierta y caridad perfecta, sentido y conocimiento, Señor, para que cumpla Tu santo y veráz mandamiento. (San Francisco de Asís)

Son las invocaciones y agradecimiento de los hermanos menores Fr. Juan Poma y Leónidas Román, quienes dispuestos a la llamada de Dios para su ministerio, han dicho sí a la vocación de servir a Dios con un corazón limpio y al obrar según la voluntad del Altísimo. Que Dios les bendiga y les acompañe siempre…!

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